viernes, 21 de septiembre de 2012

Gwen Steffani and the right to repeat!

Gwen Steffani repite ropa. Tiene derecho, como todo mortal. Y este post nada tiene que ver con criticar. Casualmente me acabo de dar cuenta de esto y me pareció interesante. 




Hace unos meses había publicado la foto de la izquierda en uno de mis muros de Pinterest. Gwen Steffani es uno de mis íconos de estilo, así que sigo mucho lo que se pone. 


Y hoy, buscando referencias para otro post que pienso publicar más adelante, me encontré con esta otra foto de Gwen usando la misma combinación, con diferentes accesorios. 




Imagino que algunos críticos de moda, fashionistas y demás, la crucificarían. Pero, ¿no es lo que hacemos tod@s? Me parece muy bien que Gwen, siendo una celebridad, busque formas diferentes de usar algo que le gusta. Imagínense la cantidad de ropa desperdiciada que se esconde en los closets de la mayoría de nuestras celebridades favoritas. 

Si nosotras mismas, simples mortales con corto presupuesto, tenemos cantidad de cosas que almacenamos por años sin usar. Yo soy una, que durante meses me da con usar las mismas piezas y varias veces al año tengo que hacer limpiezas de closet para descubrir miles de cosas que no me pongo y que pueden estar nuevas para otras personas. 

No sé, cuál será el criterio de Gwen Steffani para invertir en ropa y renovar su closet. Pero me parece que no está mal repetir de vez en cuando, sin vivir de la obsesión de que no puede volver a ponerse algo porque ya la vieron con tal cosa. Que de esos casos, ya hay muchos.  

pics de JustJared.com 

jueves, 20 de septiembre de 2012

Cancun trip: The Food at the Fairmont Mayakoba

Finalmente, por mi ya sabido gusto por la comida, no podía dejar de hablarles de mi viaje a Cancún sin compartir un breve post sobre lo que comí. Definitivamente, después de la comida criolla, la mexicana es mi favorita (y después la italiana y así sucesivamente...). 


Esto de arriba son los famosos "tamales", que prácticamente son los mismos "pasteles en hoja" dominicanos, pero en lugar de estar hechos con plátano, están hechos con harina de maíz. Prefiero los de plátano. Algo que me gustó mucho fueron los "chilaquiles", pero de ellos no tengo fotos. Desayuné chilaquiles todos los días. 


Lo de arriba, fueron unas riquísimas quesadillas de camarón y chorizo. Lo que más me gustó de todo lo que comí. Y es algo que podemos copiar fácilmente. A un lado está el guacamole y una especie de pico de gallo, que no era exactamente el clásico pico de gallo, sino unas tiras de pimientos, pepinillos y cebollas cortadas en juliana, con un poco de pimienta, que le añadía una saborcito picante. 



Una noche en la que nos encontramos unos amigos mexicanos, probamos esto llamado "Mezcal". Es un destilado similar al tequila (pues también se extrae del Agave), que tiene un sentimiento más criollo y menos comercial. Según Wikipedia, hay un dicho que reza: "Para todo mal: Mezcal. Para todo bien, también". jajajjaja. Se toma generalmente con sal de gusano y rodajas de naranja, en lugar de la combinación de sal común y limón, del tequila. 


Estas fueron unas "alitas picantes"... ¡biennn picantes!! 


Y esta ricura fue una deliciosa ensalada Cobb, con tiras de pollo y blue cheese. 


Cuando en hoteles, me gusta sellar el desayuno con un plato de frutas, es un lujo que no puede uno darse a diario en República Dominicana. Éste plato lo combiné con granola, mermelada y creamcheese, y estaba todo rico. 

¿Saben qué extrañé? El jugo de chinola (maracuyá, passion fruit). Creo que en Cancún no han descubierto lo rica que puede ser una margarita de chinola, ¡pues no había en el hotel! 

Una mañana me topé con que el Fairmont Mayakoba tiene su propio "Huerto del Chef", lo cual explica que fuera todo tan fresco y natural. 



miércoles, 19 de septiembre de 2012

Cancun Trip: The Fairmont Mayakoba!!

Siguiendo el recuento de mi fugaz, pero divino, viaje de cuatro días, me toca hablarles del hotel de nuestra estadía: The Fairmont Mayakoba- Riviera Maya. Tengo que decirles que si he de ir al cielo, Dios sabe que estoy trabajando para que allá arriba me traten como en este sitio. 



El sitio es simplemente bellísimo, extremadamente traquilo y relajante, paradisíaco y acogedor. Pertenece a la comunidad cerrada de resorts Mayakoba. Ha sido galardonado por varios años con la categoría 5 diamantes de la AAA (¡yo ni sabía que existía esta categoría!). 


Desde el lobby en el edificio principal, puede verse una vista panorámica del lugar que es todo verde. 




Antes de conocer el hotel, me impresionó bastante el trato del personal. He ido a muchos hoteles aquí y en otros países, pero nada como la simpatía de esta gente, desde el chofer que nos llevó desde el aeropuerto, hasta quienes nos ayudaron con las maletas. Y aparte de todo, podías preguntarles cualquier cosa sobre el hotel y te sabían responder. 





La interacción con la naturaleza es algo que jamás había visto en ningún otro hotel y se nota el real respeto al medio ambiente, lo cual les ha merecido también premios de The Green Forest Alliance y Green Key. Según me contaron, la laguna y los manglares que rodean el Fairmont, forman parte de un área protegida, preservada por los hoteles que conforman el complejo Mayakoba. Y no era raro encontrar animales silvestres en cualquier rincón. 

A esta familia me la encontré un día camino a mi habitación





Y a esta iguana, ¡camino a la playa!


Entonces hasta el momento, tanto el personal del hotel como los animales residentes fueron lo suficientemente buenos anfitriones como para que quisiera quedarme por siempre. Pero hay más... ¡mucho más!


¿Ven mi cara de felicidad en esta foto? Pues la tomé en la terraza de la primera habitación que me tocó al llegar. Sólo le faltó una cocinita para ser el apartamento de soltera ideal. Espaciosa, baño y closets perfectos, en el primer piso de una especie de cabaña. 


Camino a mi habitación

Edificio de mi habitación

¡Sí, eso es una terraza en el fondo!

La mejor terraza para hacer laudes de hecho


¡Sí, eso es un jacuzzi con vista a un patio!
Sé que están boquiabiertos y que ya no necesitan ver más. Pero este fue mi hogar por una noche. Como ya saben, nos íbamos al siguiente día, pero no pudimos debido a la tormenta Isaac, que estaba en territorio dominicano y nos vimos forzadas a quedarnos dos noches más en Cancún (¿qué pena no? :P)





Mi segunda habitación fue con vista a la laguna, justo cuando no creía que algo pudiera superar a la primera, (y ni se imaginan lo que son las suites). Las amenidades de este hotel son una cosa maravillosa. La crema y el gel de baño tienen un olor calmante que nunca olvidaré (porque los traje conmigo :D) y había todo lo necesario. 


¡Tenía siglos que no me montaba en una bicicleta!





La playa está a 1 o varios kilómetros de las habitaciones, para llegar puedes hacerlo por el servicio de transportación o en bici. ¿Que cómo es? ¡Pues es Cancún! Una de las playas más famosas del mundo. Se te hunden los pies en la arena, se una delicia. 





Yo, en definitiva, me lo pasé fenomenal. Ya sólo me queda hablarles de la comida. ¡Hasta mañana!


All pics taken by me, give me credit!